¿Cómo analizar el ecosistema de innovación en salud en Colombia?

¿Cómo analizar el ecosistema de innovación en salud en Colombia?

Desde hace dos años el Instituto de Innovación y Prospectiva en Salud INNOS, decidió hacer una búsqueda de los principales avances, logros y desafíos de la innovación en el campo de la salud, de forma que este panorama sea un insumo para identificar activos y potencialidades; a partir del reconocimiento de los tres motores principales de la mejora en la salud de las naciones: el crecimiento económico, el desempeño del sistema de salud y la generación y adopción de innovaciones en salud.

En 2022 presentamos la primera versión del Panorama de Innovación en Salud PINNOS. En este año 2023 hemos avanzado en una nueva presentación del Panorama, tomando como base los hallazgos y los análisis del año anterior y mejorando igualmente las fuentes de información, las técnicas de análisis a partir de indicadores y recopilados de bases de datos complementarias.

Por ejemplo, para la evaluación de los niveles de madurez del ecosistema utilizamos el modelo EIT Health InnoStars 2023. De igual manera, utilizamos el modelo TRL para las innovaciones basadas en I+D y para la innovación basada en tecnologías se aplicó el modelo de madurez de Innovación Digital en Salud DHO-MM.

En el campo de la innovación social decidimos utilizar el modelo de madurez MIS-SM, mientas que para evaluar la gestión de innovación en organizaciones optamos por varios modelos: el de madurez del cliente CRL, el de madurez del negocio FRL, el de madurez para la financiación FRL y el modelo de madurez de propiedad intelectual IPRL. Todos los procedimientos están detallados para consulta en los anexos técnicos del reporte completo, que se pueden encontrar en Reporte PINNOS 2023

Mediante el uso de una gran fuente primaria: la encuesta PINNOS 2023 se identificaron 191 organizaciones. De ellas 16 pertenecen al sector pública, 143 al sector privado, 10 se reportaron como organizaciones mixtas y 22 como pertenecientes a la sociedad civil. Cada una de estas organizaciones reportaron en la encuesta cuáles roles desempeñan actualmente dentro del ecosistema de innovación. Una buena parte de estas organizaciones cumplen más de un rol de los que se observan a continuación: (Figura 1)

Figura 1: Roles dentro de un ecosistema de innovación.

Estas organizaciones son diversas, heterogéneas y complementarias. Encontramos IPS, Gremios, asociaciones de pacientes, Centros de investigación, EAPB, Universidades y organizaciones comunitarias, entre otras.

Los demás resultados de la encuesta PINNOS 2023 también están disponibles en el documento: Reporte PINNOS 2023

De igual forma, esta fuente primaria se complementó para su análisis con fuentes secundarias de amplio reconocimiento en el medio. Estas fuentes fueron:

  • DNP, Superintendencia de Industria y Comercio, INNpulsa, MinCiencias, OCyT, Plataforma Nacional de Datos Abiertos de Colombia, MinSalud y MEN.

Con los resultados de este reporte, nos acercamos a la construcción de una panorámica cada vez más amplia e incluyente de la innovación en el sector de la salud en el país.

¿Para qué innovamos?

En el mundo actual, la innovación en salud se ha convertido en un elemento indispensable para garantizar la eficiencia de los sistemas de salud y para promover el bienestar y la calidad de vida de las comunidades. El Reporte del Panorama del Ecosistema de Innovación en Salud en Colombia 2023 (PINNOS 2023), publicado por INNOS, ofrece un panorama amplio de las contribuciones más significativas que en materia de innovación se han desarrollado en Colombia durante este año.

En primer lugar,  hay que tener en cuenta que innovar permite desarrollar un ecosistema de innovación en salud maduro y dinámico. Este ecosistema es fundamental para incrementar la eficiencia de los sistemas de salud y garantizar que los ciudadanos reciban atención médica de calidad. La innovación impulsa la transformación de los sistemas de salud, y conduce a mejoras en la manera en que se diagnostican, tratan y gestionan los desafíos de salud en Colombia.

Además, innovamos para abordar los retos de salud actuales y futuros. El Reporte PINNOS 2023 resalta la importancia de promover y respaldar la investigación y el desarrollo de soluciones innovadoras que se centren en problemáticas relevantes, como las enfermedades no transmisibles, la salud mental y la salud sexual y reproductiva. En ese sentido, la innovación es un medio para solucionar problemas y mejorar la calidad de vida de las personas.

La innovación también constituye una herramienta para identificar y superar los desafíos técnicos, de conocimiento, de articulación, coherencia y políticos que afectan los sistema de salud alrededor del mundo. Al proponer estrategias para abordar estos desafíos, la innovación se convierte en un generador de cambio, permitiendo que el sistema de salud se fortalezca y se adapte a las necesidades cambiantes de la sociedad.

Otro punto crucial es que innovamos para fomentar la coherencia y la priorización del bienestar colectivo en la formulación de políticas de salud. El Reporte enfatiza la necesidad de que los planes, las metodologías, el análisis de la información y la entrega de informes se armonicen, asegurando que las políticas de salud estén alineadas con el objetivo fundamental de mejorar la salud de la población.

La innovación también contribuye a mejorar los resultados de la atención médica. La tecnología y las plataformas digitales permiten la prevención, el diagnóstico y el tratamiento de enfermedades de manera más efectiva y accesible. La telemedicina, por ejemplo, supera barreras geográficas y brinda atención a comunidades remotas, lo que se traduce en una atención médica más equitativa y eficaz.

En conclusión, innovamos en el ámbito de la salud para construir un sistema más eficiente, para abordar desafíos de salud apremiantes, para fortalecer el sistema de salud, priorizando el bienestar colectivo en la formulación de políticas y mejorando la atención médica. Si quieres conocer más, consulta el documento completo del Reporte PINNOS 2023.

Los resultados electorales del 29 de octubre: ¿Cómo afectan la reforma a la salud?

Los resultados electorales del 29 de octubre: ¿Cómo afectan la reforma a la salud?

El pasado 29 de octubre el país eligió nuevos gobernadores, alcaldes, diputados, concejales y miembros de Juntas Administradoras Locales. Para muchos el resultado puede interpretarse como un mensaje claro de rechazo a las políticas nacionales que el presidente Gustavo Petro y su equipo de gobierno vienen proponiendo desde agosto del año pasado. El partido del presidente no ganó en alcaldías y gobernaciones de ciudades principales ni de departamentos grandes. Los triunfos más llamativos de opositores al partido de gobierno son los de Galán, Gutiérrez, Eder y Char en las alcaldías de las 4 principales ciudades del país.

¿Cuáles son los posibles efectos de estos resultados sobre el trámite de las principales reformas que ha emprendido el gobierno en el legislativo? La respuesta no es simple ni tampoco obvia. Una primera posibilidad es que, en efecto, el precario respaldo hacia los candidatos del Pacto Histórico signifique un debilitamiento del poder del gobierno para conseguir las mayorías necesarias en Cámara y Senado, que le permitan seguir adelante con su agenda legislativa con la que pretende modificar asuntos tan profundos y relevantes como la salud, el empleo y las pensiones.  Recordemos en todo caso, que el gobierno ha contado con respaldo a estas iniciativas, específicamente a la reforma a la salud, de otros partidos políticos para que continúen su avance hasta el momento. Si esta primera posibilidad se materializa, estaríamos ante una posible tendencia hacia la reformulación o incluso, el retiro de algunas de estas iniciativas, porque podrían convertirse en inviables en su discusión y dejarían con muy bajas probabilidades su aprobación.

Pero también podría darse un escenario en el que el gobierno, sin renunciar a sus propósitos reformistas, se abra mucho más al diálogo y al consenso, y de esta manera, reorganice sus proyectos de Ley para que recojan las posturas críticas que se han hecho visibles durante lo corrido de su primer año en el poder y que, especialmente para el caso de la reforma a la salud, han puesto sobre la mesa muchas opiniones contrarias que una y otra vez han llamado no solo a cambiar lo que se pretende con el proyecto sino también, han solicitado su retiro del trámite que cursa actualmente en la Cámara de Representantes.  Esta posibilidad daría pie a que la reforma a la salud tenga un segundo aire, si es que logra reconstruirse a partir de los consensos con los demás sectores y consigue recoger las críticas que permanentemente ha recibido.

Un tercer escenario sería el más inconveniente de todos, porque supondría un giro contrario a la apertura y al consenso. En esta situación hipotética, el gobierno se encerraría y sería más radical e impositivo en el avance de sus reformas, cerrando todavía más la puerta al diálogo y a la concertación. De esta forma, haría ver sus propósitos como un mandato popular que está siendo atacado por la oposición y por las fuerzas que no quieren ver materializados los cambios con los que ganó la presidencia el año pasado. Sería esta una ruta tortuosa y lamentable, que además afectaría profundamente al país y la gobernabilidad, así como la gobernanza del actual presidente y su equipo.

Vienen días y semanas de reflexiones para el gobierno en las que no debemos olvidar que, en lo concerniente al sector salud, ya hay alertas que atender y procesos que no dan espera porque muchas situaciones que vienen ocurriendo podrían tener también efectos a largo plazo en la sostenibilidad del sistema de salud y en los indicadores de acceso, oportunidad y calidad de la atención.  Desde luego el llamado sigue siendo al diálogo y al fortalecimiento de los procesos democráticos, participativos y de construcción de consensos para el beneficio común y para que se avance positivamente en resolver las dificultades del sistema de salud, partiendo de los logros que se han conseguido y enfocando los esfuerzos en superar las situaciones adversas que vive hoy el sistema.

ACEMI evalúa los resultados de la subcomisión accidental y formula una contrapropuesta al gobierno

ACEMI evalúa los resultados de la subcomisión accidental y formula una contrapropuesta al gobierno

En el marco del debate sobre la reforma a la salud en la Cámara de Representantes, la subcomisión accidental conformada para revisar el texto del proyecto entregó su informe final el pasado 3 de octubre. En este escenario, la Asociación Colombiana de Empresas de Medicina Integral (ACEMI), que representa a las 11 EPS más importantes del país, ha expresado sus preocupaciones por la falta de acuerdos esenciales, en particular, en relación con los roles y responsabilidades de las aseguradoras dentro del nuevo sistema de salud propuesto en el proyecto de ley. Además, ACEMI llamó la atención sobre las dificultades financieras que actualmente enfrentan las aseguradoras agremiadas, principalmente debido a la insuficiencia de los recursos de la UPC.

Las inquietudes planteadas por ACEMI en relación con el proyecto de reforma se centran en dos cuestiones principales: en primer lugar, la falta de una definición sobre quién debe asumir la responsabilidad en la gestión del riesgo en salud y el riesgo financiero; y, en segundo lugar, la eliminación del principio de libre elección.

Según ACEMI, el proyecto de ley carece de una definición clara acerca de quién asumirá la responsabilidad de guiar al usuario de manera integral a lo largo de todo su proceso de atención, lo que podría generar obstáculos en términos de oportunidad y acceso a los servicios de salud. Además, no se ofrece una descripción precisa de cómo se configurarán las redes de servicios y los mecanismos de referencia y contrarreferencia, lo que podría complicar la transición del usuario desde el primer nivel de atención hacia los servicios especializados.

Adicionalmente, ACEMI subraya que el proyecto de ley no define de manera precisa la función de compra de servicios, lo que acarrea un potencial riesgo de desbordamiento en el gasto en salud y, como consecuencia, el agotamiento temprano de los recursos disponibles. Este escenario, indudablemente, daría lugar a interrupciones en la prestación de servicios, ya que los prestadores -las IPS- dejarían de recibir los pagos oportunamente. Para ACEMI, la falta de claridad en la gestión del riesgo financiero podría resultar contraproducente para el sistema, ya que no se establecerían mecanismos adecuados para controlar el gasto en salud.

Por último, el gremio destacó que la implementación del enfoque de adscripción territorial a través de los Centros de Atención Primaria en Salud (CAPS) suprimiría el principio de libre elección que actualmente caracteriza al sistema de salud. Esto conllevaría a que las EPS, o las Gestoras de Vida y Salud, como se propone en el proyecto de ley, se vean obligadas a operar exclusivamente en los territorios designados por el gobierno.

Ante este escenario, las EPS asociadas en ACEMI han presentado una propuesta al gobierno nacional con el objetivo de crear un nuevo escenario para ser considerado en la discusión que se reanudará la próxima semana en la Cámara de Representantes.

En esta propuesta, el gremio de las aseguradoras sugiere una transformación en el papel de las EPS, que podrían evolucionar en Gestoras de Salud y Vida, conforme a lo propuesto en el proyecto de reforma. Bajo esta reconfiguración, las Gestoras asumirían la responsabilidad de la gestión del riesgo en salud, mientras que la gestión del riesgo financiero sería delegada al gobierno a través de la ADRES. En este escenario, las Gestoras tendrían la tarea de representar y guiar al usuario a lo largo de su ruta de atención, incluyendo la configuración de redes de servicios, aunque sin la administración de los recursos financieros. Por otro lado, la ADRES se encargaría de desembolsar los recursos a los prestadores organizados en las redes establecidas por las Gestoras, asumiendo el riesgo financiero correspondiente a esta operación y reconociendo a las Gestoras un porcentaje por su tarea.

Sin embargo, este escenario todavía plantea algunos interrogantes que deberían ser abordados en la discusión que se avecina en el congreso. En primer lugar, no está claro quién asumiría la responsabilidad de la compra de servicios, que es muy diferente de simplemente pagar la atención médica con los fondos mancomunados. Vale la pena recordar que la compra de servicios implica un enfoque más activo, que involucra la selección de proveedores habilitados, la adquisición de servicios costo-efectivos, el establecimiento de mecanismos de pago que fomenten el uso adecuado de recursos limitados, y la negociación de acuerdos. En este contexto, surge la pregunta de si la ADRES también asumiría esta función o si se limitaría a ser el pagador de los servicios prestados.

Otro aspecto que aún no está claro es si se mantendría el principio de libre elección para los usuarios. En otras palabras, si bajo el modelo de Gestoras, los usuarios podrían elegir a cuál afiliarse. Se ha mencionado que, según el modelo propuesto en la reforma, el primer nivel de atención funcionaría bajo el sistema de adscripción territorial y se financiaría la oferta, mientras que la atención especializada estaría a cargo de las Gestoras. La propuesta de ACEMI sugiere que las Gestoras se harían cargo de toda la ruta de atención, lo que cuestiona la idea de adscripción territorial contenida en el proyecto de ley.

De todas formas, es fundamental prestar atención a la discusión que comenzará en el congreso la esta semana y abordar las conversaciones relacionadas con las dificultades financieras derivadas de la insuficiencia de la UPC. Es importante comprender que cualquier cambio debe realizarse teniendo en cuenta la complejidad de los sistemas de salud y su frágil equilibrio. De lo contrario, el más perjudicado sería el usuario que busca una atención en salud oportuna, integral y de calidad.

 

Autor: Santiago Galvis-  INNOS

190 soluciones innovadoras locales fueron reconocidas por mejorar la salud colombiana

190 soluciones innovadoras locales fueron reconocidas por mejorar la salud colombiana

Bogotá, octubre de 2023 – El Instituto de Prospectiva e Innovación en Salud (INNOS) en colaboración con la Asociación de Laboratorios Farmacéuticos de Investigación y Desarrollo (AFIDRO), la Universidad El Bosque, y con apoyo de Pfizer, Janssen, Roche, Novartis y Astrazeneca, presentó el informe Anual de Innovación en Salud en Colombia (PINNOS), con el cual se busca reconocer, entender y visibilizar las innovaciones con impacto en el sector salud generadas por los actores del ecosistema. La iniciativa visibiliza tendencias, madurez, áreas de oportunidad y retos de quiénes impulsan y apoyan las innovaciones en salud en el país.

El estudio permitió también evaluar el nivel de madurez del Ecosistema de Innovación en Salud de Colombia, y se determinó como “funcional” debido a su enfoque centrado en el paciente y sus sólidos cimientos para la adopción e implementación de tecnologías innovadoras en la atención médica.

En el reporte, participaron 190 soluciones innovadoras centradas en metodologías, protocolos y manuales; desarrollo de software y tecnología, entre otros. Durante el evento se entregaron 11 reconocimientos a innovaciones como Pazsalud, Barco Hospital, Trepsi, entre otros. En categorías como innovación social e innovación que promueve el desarrollo productivo. Y se resaltaron 4 menciones honorificas a entidades como la SIC, La secretaria de salud distrital, Indigo y Clinica CES, por sus aportes al ecosistema de innovación.

Según Carlos Felipe Escobar Roa, Director de INNOS, “El ecosistema sigue siendo robusto, con participación de todos los actores, con instituciones que representan todos los roles que necesitamos para generar, dinamizar y adoptar la innovación sanitaria. Con equipos trabajando en las grandes ciudades pero también en y para las regiones. El ecosistema requiere tener más reconocimiento e impulso. Las soluciones a muchos de los desafíos que aún tiene el país en materia de salud están muchas ya construidas, en espera de ser encontradas, valoradas, escaladas y transferidas a otras regiones e instituciones. En particular hoy el ecosistema necesita señales claras de prioridades, necesita que se articules y armonicen las iniciativas que se vienen gestando como la Política de Reindustrialización de Salud, la Misión de Soberanía Sanitaria, el programa de Ecosistemas Digitales en Salud de MinTIC, el Ecosistema de Emprendimiento CEmprende y la Reforma a la Salud entre otras. Señales claras, articulación e iniciativas, seguramente traería también mejores fuentes de ­financiamiento. Pero también requiere el ecosistema consolidar las condiciones de largo plazo. Hacer de Colombia un país más atractivo para invertir en investigación, innovación, transferencia tecnológica, de conocimiento y para el impulso a nuestros emprendedores, sean ellos de base tecnológica, cientí­ca o social.”.

Asimismo, se resaltaron los numerosos desafíos que enfrenta la innovación en el país, entre los que se destacan la necesidad de promover la colaboración entre actores estratégicos, mayor seguridad jurídica, protección de la propiedad intelectual, incrementar la inversión en investigación y desarrollo y reforzar la capacitación de los profesionales de la salud. Todo esto con el objetivo de mejorar la atención médica y contribuir a la calidad de vida de la población.

Dentro de las recomendaciones que da el reporte para mejorar la innovación en salud en el país, se resaltan:

  1. Consolidar un entorno regulador y legal que fomente la innovación y evite barreras innecesarias, proteja la propiedad intelectual y garantice la seguridad y la e­ficacia de las soluciones de salud.
  2. Inversión en investigación y desarrollo, capacitación y formación de profesionales de la salud para impulsar la innovación.
  3. Participación y colaboración de comunidades, actores locales e internacionales para abordar desafíos globales en el sector salud.
  4. Políticas de innovación en salud que promuevan la participación de diversos actores
  5. Establecimiento de indicadores de seguimiento y evaluación para medir el progreso y el impacto de las iniciativas de innovación
  6. Fortalecimiento y creación de redes de colaboración multiactor

Para María Clara Escobar, presidenta ejecutiva de AFIDRO, este reporte es un gran logro que muestra el potencial excepcional que tiene la innovación en el país. “La innovación de la industria farmacéutica es sumamente importante para la sociedad, por eso hacemos un llamado especial a que se reconozca la necesidad de propiciar escenarios en los que se respeten los derechos de propiedad intelectual y se propicie un entorno de certeza jurídica y predictibilidad, pues solo así funcionara el ecosistema de la innovación”.

Es fundamental continuar promoviendo y apoyando la investigación y el desarrollo de nuevas soluciones para abordar los desafíos actuales y futuros.

Reviva el evento de lanzamiento en el siguiente enlace: https://www.youtube.com/watch?v=5ACQgL_In9o

Consulte el Informe PINNOS 2023 completo en: https://pinnos.co/wp-content/uploads/2023/10/Reporte_PINNOS_2023.pdf

Cuestionamientos de un grupo de rectores de universidades a la propuesta de reforma a la salud.

Cuestionamientos de un grupo de rectores de universidades a la propuesta de reforma a la salud.

Hace algunos días se conoció en los medios de comunicación un documento firmado por rectores y rectoras de 6 universidades y un vicerrector de otra universidad, en el que presentan sus observaciones e inquietudes relacionadas con la propuesta del gobierno nacional que cursa actualmente en el congreso de la república. Desde el Instituto de Innovación y Prospectiva en Salud INNOS, hacemos una lectura y un análisis de los puntos principales del comunicado, dada su importancia en el momento actual del trámite de la reforma en el legislativo.

El documento parte por el reconocimiento de la salud como derecho fundamental, establecido de esta manera en la Ley 1751 de 2015. Prosigue con la preocupación sobre la situación actual del sistema de salud, que, según se ha manifestado por distintos actores, experimenta problemas de liquidez y de flujo de recursos que ponen en riesgo la prestación de los servicios y, por tanto, la garantía del derecho.

Reconocen los rectores que es responsabilidad del Estado la definición de las políticas públicas que orienten las relaciones entre los distintos actores del sistema, siempre enfocadas en garantizar el acceso a los servicios, en condiciones óptimas de oportunidad y calidad.

Los avances del sistema en los 30 años desde su creación son subrayados en esta comunicación y entre ellos se resalta la cobertura casi universal, los efectos en la esperanza de vida al nacer, la eficiencia en el gasto, el reducido gasto de bolsillo y otros relacionados; con los cuales hacen visibles los logros conseguidos. De igual manera, los rectores reconocen retos del sistema en su gobernanza, en acciones e indicadores de salud pública, en cuanto a brechas entre zonas urbanas y rurales relacionadas con el talento humano y el flujo de recursos para la atención preventiva.

Este comunicado se enfoca en su parte final en cuatro aspectos que resumimos a continuación:

  • Advierten que la situación actual de liquidez del sistema es crítica y que podría afectar la oportunidad y la calidad de la atención. Según dicen, esto tiene como causas la insuficiencia de la UPC y el cálculo errado de los costos de las atenciones no cubiertas por los recursos del Plan Básico de Salud. Advierten también una deficiencia en los pagos a los administradores por parte de la ADRES.
  • Un retroceso que podría causarse por causa de la reforma, impactando cobertura y costo para los usuarios. Este punto lo relacionan con el anterior y avanzan en su análisis planteando que las presiones sobre el gasto que generan el envejecimiento poblacional, el aumento en la demanda de algunos servicios, la combinación de enfermedades transmisibles y no transmisibles persistente en la actualidad y la ampliación del plan de beneficios.
  • Hacen los rectores un llamado al gobierno para que garantice la financiación del sistema de salud, partiendo por el flujo oportuno y suficiente de los recursos en la actualidad.
  • Coinciden las universidades en la necesidad y en la importancia de acometer una reforma al sistema de salud, pero garantizando la gestión profesional del riesgo, con sistemas de contratación adecuados y un conjunto de incentivos que promuevan la eficiencia en sentido amplio. Les preocupa en este punto, quién asumirá las funciones de articulación de las redes de prestación de servicios y ampliando la gobernanza con la participación de las instituciones del sistema.

Hay finalmente un llamado a resolver las dificultades actuales en el flujo de recursos que según se ha dicho, han generado pérdidas cercanas a 5,6 billones de pesos en las EPS y aumento de cartera en las IPS.

Los rectores ponen a disposición del gobierno nacional, los conocimientos y capacidades de sus instituciones para fortalecer los espacios de concertación con miras a mejorar el sistema de salud y aportar en las soluciones que se requieran.

Pocos días después de la publicación de este comunicado se conoce otro proveniente esta vez, del doctorado interfacultades en salud pública de la Universidad Nacional de Colombia, en el que plantean una postura distinta de la expresada por los rectores de las universidades antioqueñas. Para el DSP-UN hay una visión completamente opuesta a lo que el comunicado de rectores de Antioquia plantea con respecto a la reforma que cursa en el congreso.

Hay elementos tanto ideológicos como políticos y técnicos que resaltan en su argumentación, para avalar la necesidad de introducir cambios estructurales al sistema de salud que se creó en 1993. Debaten cada uno de los 4 puntos centrales del comunicado, con datos y con reflexiones sustentadas en ellos, que refuerzan la necesidad de ampliar el debate sobre las condiciones del sistema de salud y no dejarse llevar por presiones de medios de comunicación o de actores del sistema, como las EPS, que juegan un rol fundamental en su operación diaria.

Con respecto a la iliquidez actual del sistema, presentan los estudios del Ministerio de Salud y varios comunicados de la ADRES para señalar que desde 2008, se han hecho los ajustes anuales a la UPC para garantizar su suficiencia, con los criterios que están definidos para tal propósito. También que la ADRES ha auditado las cuentas presentadas con cargo a los presupuestos máximos y que estas cuentas requieren una revisión profunda dados los altos niveles de glosa y anulación que harían pensar en que muchos de estos recursos no se cobran con la justificación necesaria.

Se cuestiona el argumento sobre un posible retroceso en cobertura y costos para los usuarios, de ser aprobada la reforma en el congreso. Allí el Doctorado refuerza la necesidad de la promoción y la prevención de la salud de personas y comunidades, retomando datos de coberturas insuficientes en controles prenatales en lugares apartados del país, especialmente.  Para ello plantean un modelo basado en APS en el territorio, que cambie las prioridades de lo curativo a lo preventivo. Al tiempo se explica que el modelo de prestación de servicios concentra sus acciones en un número reducido de IPS en grandes ciudades y que una gran parte de los recursos van a unas pocas IPS que tienen la capacidad de ofertar las atenciones de mayor complejidad. Esto sucede al tiempo que la red pública se deteriora y se declara en riesgo fiscal y financiero.

Sobre la preocupación de las universidades antioqueñas por la sostenibilidad financiera y la administración del riesgo, el DSP-UN insiste en que el sistema actual se sustenta en la intermediación y para ello requiere la definición de un plan de beneficios que, de lo contrario, no sería necesario. La Ley 1751 de 2015 avanzó en este sentido y planteó la definición del sistema desde las exclusiones, cuando se afirmó en su momento que “todo lo que no estaba explícitamente excluido quedaría implícitamente incluido”. En contraste apoya el comunicado del doctorado, el fortalecimiento de ADRES como administrado y pagador único del sistema, organizador de las RIISS territoriales y de esta forma fortalecer la promoción, prevención y atención integrales.

Sumado a estos puntos, se resaltan aspectos como la falta de transparencia en el flujo de recursos que se giran a las EPS, la constitución y garantía de las reservas técnicas, los procesos de integración vertical y comercial que existen desde las EPS con otras empresas del sector salud, la naturaleza pública de los recursos de la UPC que limita su utilización a la prestación de servicios de salud y las interrelaciones entre los recursos de esta UPC y los que se generan por los planes de medicina prepagada y otras pólizas.

 

Desde INNOS saludamos este tipo de expresiones diversas desde la academia y que siempre se hagan de manera crítica, así como constructiva, aportando los recursos que cada institución tiene para beneficio común. El debate que ha suscitado esta reforma es muy significativo y ha llegado hasta todos los sectores de la sociedad colombiana. Es evidente que no es un asunto simple y que la complejidad misma del sistema requiere de múltiples análisis y de una apertura total para que gobierno, empresarios, académicos, gremios, pacientes, sociedad civil, medios de comunicación y todos los ciudadanos; tengan una voz para aportar en la construcción del mejor sistema posible para todos los colombianos.

Hay que pensar la salud en sentido más amplio que la prestación de servicios que frecuentemente se asocia solo con la curación y con la rehabilitación del daño que producen las enfermedades. Es por ello que se requiere un debate que va más allá de lo puramente técnico y atraviesa lo político y a la vez, muchas posturas ideológicas que también son válidas en una sociedad democrática como la nuestra.

Vemos estos comunicados de sectores académicos altamente reconocidos, como una expresión de esa diversidad y de la fortaleza de las instituciones democráticas del país. De igual manera, como un llamado al gobierno para que la discusión sea incluyente y recoja realmente las posturas de los todos los sectores, para lograr consensos que redunden en beneficios colectivos.

Luis Alejandro Gómez Barrera- Coordinador Académico INNOS

Este es el balance que deja la Comisión Accidental de la Reforma a la Salud en el Congreso

Este es el balance que deja la Comisión Accidental de la Reforma a la Salud en el Congreso

El país conoció hace algunas semanas que, en el desarrollo del debate del proyecto de Ley 339 que pretende reformar el sistema de salud colombiano, se decidió el día 30 de agosto, por parte de la presidencia de la cámara de representantes, conformar una Comisión Accidental que ampliara el debate a este proyecto tan relevante, abriendo de esta forma un espacio de discusión con actores sociales, académicos, gremiales, políticos y de todos los sectores que quisieran aportar sus opiniones y presentar propuestas al articulado que se encuentra en discusión.

La comisión accidental fue convocada por la mesa directiva de la plenaria de la Cámara y se conformó con 23 congresistas, con representación de todas las tendencias políticas que allí se encuentran. La finalidad de la comisión accidental, según se observa en la proposición aprobada por la mesa directiva, era: “…la concertación de un texto que será el resultado de la elaboración de las mesas de diálogo nacional que estarán abiertas a la participación ciudadana, política, organizaciones del sector y demás interesados…”

Entre el 25 y el 27 de septiembre pasados, esta comisión convocó a 5 mesas de diálogo nacional. Las mesas y sus temáticas fueron:

  1. Gestoras y ADRES
  2. Disposiciones generales y transitorias
  3. Políticas y régimen laboral
  4. Sistema de información, participación social e IVC
  5. Modelo de salud, organización del sistema e ISE.

Cada mesa tenía una orientación a una parte específica del texto del proyecto de Ley, abarcando algunos títulos y capítulos en los que las temáticas están desarrolladas.

Posterior a las reuniones de las 5 mesas temáticas, la comisión accidental se reunión entre el miércoles 27 de septiembre en la tarde y el lunes 2 de octubre, para revisar los aportes recogidos en las mesas y presentar el informe final de actividades que fue publicado el pasado martes 3 de octubre.

En este informe se resumen de forma amplia y sistemática los aportes de los participantes de cada una de las mesas técnicas, incluyendo además de su nombre, la representación de entidades o grupos de ciudadanos que cada uno de ellos ejercía.  El informe también expone las principales decisiones a las que llegó. Entre estas decisiones se encuentran los puntos en los que la comisión logró acuerdos, aquellos artículos del proyecto en los que hubo disensos y los que por alguna u otra razón, no fueron abordados por la comisión accidental.

Los temas en los que se lograron acuerdos fueron:

  • Política farmacéutica, de investigación y formación y régimen laboral (mesa 3, Títulos VIII, IX y X)
  • Sistema de información, participación social e IVC (mesa 4, Títulos V, VI, VII y VIII)
  • Gestoras y ADRES (mesa 1, artículos 55-68, 70, 72-75 del título IV)
  • Modelo de salud, Organización del sistema e ISE (mesa 5, artículos 4-8, 10, 11, 15-17 y 21 del título II)

Los temas en los que hubo disenso fueron:

  • Gestoras y ADRES, artículos 50 y 53 del título III; artículos 63,69 y 71 del título IV
  • Modelo de salud, organización del sistema e ISE, artículos 9, 12, 13, 14 y 31 del título II.

Los artículos y títulos no abordados fueron:

  • 113 a 119 del título XI, relacionados con la IVC y las funciones de la Supersalud
  • 18, 19, 20, 22, 23, 24, 25, 26 y 27 del Título II.
  • 28, 29, 30, 32, 33, 34, 35, 36, 37, 38, 39, 40, 41, 42, 43, 44, 45, 46 del Título II, ni el Título I.

La representante ponente Martha Alfonso informó a los medios, que no hubo cambios sustanciales en el articulado que continúa su discusión desde hoy, 5 de octubre en la Cámara.

Entre los puntos más destacables están los que se relacionan con la naturaleza y funciones de las EPS. En el articulado se dispuso que las EPS continúen sus actividades hasta por 2 años, siempre que cumplan unas condiciones mínimas que el gobierno dispondrá en el periodo de transición. Luego de este plazo, tendrán la opción de transformarse en “Gestoras de Salud y Vida”. Esta transformación también estará sujeta al cumplimiento de requisitos y a la voluntad de las propias EPS para hacerlo.

Las nuevas Gestoras tendrán funciones de organización de la red de CAPS, en el marco de las Redes Integradas RIISS, lo anterior en el marco de los lineamientos de la definición de territorios en salud y haciendo uso eficiente de la infraestructura ya existente en las respectivas zonas. De igual manera se comprometerán a cumplir los requisitos de habilitación que emita el Ministerio.

Durante el periodo de transición, las EPS serán responsables, bajo verificación del ministerio y la Superintendencia, del saneamiento de sus pasivos y de garantizar el pago total de todas las deudas existentes con la red de prestadores y demás empresas con las que tengan vínculos contractuales.

Otro aspecto de relieve es la eliminación del artículo 96 que disponía la generación de la Política de medicamentos, dispositivos y tecnologías en salud. Se le recomienda al MinSalud que desarrolle lo dispuesto en la Ley Estatutaria en esta materia, generando y emitiendo la reglamentación correspondiente.

Es interesante que una de las representantes que promovió la conformación de la comisión accidental, Julia Miranda, radicó un texto que se anexó al informe final. Allí la representante recalca las coincidencias que logró la comisión, enfocando en las funciones que deben conservar las EPS en la gestión del riesgo en salud y garantizando la transparencia en el flujo de recursos. También señaló la importancia del saneamiento contable y de fortalecer el talento humano en salud. Otros puntos de consenso que mencionó en la parte final del informe son, la importancia de fortalecer el sistema de información, aclarar las acciones de referencia y contrarreferencia y la libre elección.

Así mismo la representante Miranda señaló aspectos que no lograron consenso o que a su juicio, no fueron acogidos por las mesas de discusión en el marco de la comisión: algunos relacionados con las funciones de las EPS y de las futuras Gestoras de salud y vida, entre ellas las que podrían asumir los CAPS y otras IPS e ISE. Lo mismo ocurrió con los asuntos de la conformación y contratación de las RIISS, aunque se avanzó en la claridad sobre los temas de habilitación, autorización y coordinación.

La representante también alertó sobre la poca claridad en el modelo de aseguramiento y los modelos diferenciales para distintas zonas del país, sobre la necesidad de implementar subsidio a la oferta en los lugares donde la demanda es insuficiente y, finalmente llama la atención acerca del cálculo de la UPC y del régimen de transición y los costos que acarreará la reforma.

La representante Jennifer Pedraza, quien ha hecho oposición al proyecto, expresó que hubo avances y acuerdos en la comisión sobre temas relacionados con el giro directo por la ADRES, la prohibición de integración vertical en los niveles especializados, el énfasis en la atención primaria y la dignificación del talento humano en salud. Contrastó estos acuerdos con los puntos sin consenso entre los que mencionó los procesos de financiación, la dispersión de responsabilidades en distintos actores del sistema, las carencias en las capacidades técnicas de la ADRES para asumir funciones que se le están asignando y el porcentaje de la UPC que se asignará para gastos administrativos de las EPS, entre otros.

Contrastan algunas de estas declaraciones con otras que manifiestan su desacuerdo con los resultados de las mesas técnicas y de la comisión en general. Pacientes Colombia, organización que agrupa a voceros, líderes y representantes de pacientes de todas las regiones del país, ha expresado su preocupación por el trámite que lleva el proyecto de Ley y ha presentado hoy 4 de octubre, una petición en contra de la reforma porque no resuelve los problemas de fondo del sistema, en cuanto a sostenibilidad y oportunidad de la atención. En igual sentido se han expresado líderes y expertos que no reconocen avances profundos en el texto de la reforma, luego de las discusiones realizadas y además que la comisión escuchó algunos actores pro-reforma y prestó poca o ninguna atención a quienes presentaron reparos y propusieron cambios estructurales.

La representante Cathy Juvinao, por ejemplo, manifestó su desacuerdo con el informe de la comisión y además que se citara a plenaria al día siguiente sin haber dado el tiempo necesario para su análisis y preparar la discusión de forma adecuada. Consideró en su cuenta de X que el proyecto sería “pupitreado” lo cual ha sido criticado en el pasado por los partidos que hoy hacen parte de la bancada de gobierno.

En el mismo sentido fue la declaración del representante Andrés Forero, quien no observó cambios de fondo derivados de la comisión accidental y que los ajustes fueron solo “cosméticos”. Alertó sobre el riesgo de estatización del sistema de salud y del agotamiento temprano de recursos para la atención en salud. Todo esto acompañado del riesgo de aumentar la corrupción.

Aunque algunos sectores reconocen los aportes para robustecer el proyecto de Ley y la importancia de haber convocado la comisión con sus mesas técnicas, es claro que era un paso necesario, aunque no suficiente para que el proyecto despejara las dudas y las incertidumbres que ha generado en gran parte del país y de los actores del sistema de salud. Se espera que en lo que queda de su trámite legislativo se corrijan las deficiencias persistentes y se resuelvan las inquietudes que todavía contiene el articulado.

Por Alejandro Gómez – Coordinador Académico de INNOS