Hacia la adopción del Resumen Digital de Atención en Salud-RDA en Colombia

Hacia la adopción del Resumen Digital de Atención en Salud-RDA en Colombia

En días recientes, el Ministerio de Salud presentó un proyecto de resolución cuyo objetivo es reglamentar el Resumen Digital de Atención en Salud (RDA), estableciendo lineamientos técnicos para la Interoperabilidad de la Historia Clínica Electrónica (IHCE). Este avance es crucial para optimizar la atención médica en el país, ya que no solo define las responsabilidades de los actores dentro del sistema de salud, sino que también promueve un flujo más eficiente de información. A través del RDA, se busca garantizar la confidencialidad de los datos de los pacientes y facilitar el intercambio de información clínica entre los diferentes prestadores de servicios. Este enfoque promete generar ahorros significativos en tiempo y recursos, mejorando la coordinación y continuidad del cuidado de los pacientes.

Por lo tanto, la resolución sobre el Resumen Digital de Atención en Salud (RDA) y la Interoperabilidad de la Historia Clínica Electrónica (IHCE) representa un paso crucial hacia la modernización del sistema de salud colombiano. A continuación, se detallan algunos puntos clave del análisis sobre la importancia de esta normativa y su impacto potencial, teniendo en cuenta lo que busca resolver este acto administrativo.

En primer lugar, la Resolución se fundamenta en la Ley 23 de 1981, que establece la historia clínica como un registro obligatorio de las condiciones de salud del paciente, el cual debe gestionarse con estricta confidencialidad. Cabe destacar lo dispuesto en el artículo 34 de esta ley, donde se reconoce que, además de ser un registro obligatorio, la historia clínica es un documento privado sometido a reserva. Esto implica que solo puede ser conocido por terceros con la autorización previa del paciente o en los casos expresamente previstos por la ley.

Asimismo, la Resolución hace referencia a la Ley 1581 de 2012, en particular al artículo 5, que clasifica los datos relacionados con la salud como información sensible. De acuerdo con esta normativa, se establece que dicha información solo puede ser compartida con el consentimiento previo y expreso del paciente, salvo en los casos en que la ley disponga lo contrario.

En tercer lugar, en el marco de la Estrategia Mundial de Salud Digital 2020-2025 de la Organización Mundial de la Salud (OMS), se destaca la importancia de los estándares de interoperabilidad en la historia clínica. En este contexto, la adopción del estándar International Patient Summary (IPS), definido en el acuerdo de colaboración firmado el 23 de junio de 2023, se presenta como un referente fundamental. Este estándar facilita un intercambio eficaz y seguro de información clínica a nivel global. Al respecto, países como Inglaterra, Canadá, Brasil, Argentina, Australia y Estados Unidos están implementando el IPS en sus procesos de interoperabilidad. Este estándar ha sido adoptado globalmente bajo la norma ISO 27269, y su desarrollo futuro estará a cargo de la Organización Internacional de Normalización (ISO), garantizando su evolución como un referente en la interoperabilidad de datos de salud a nivel internacional.

Igualmente, existe un marco regulatorio que respalda esta Resolución, compuesto por diversas normativas. Entre ellas se encuentra la Ley 2015 de 2020, que establece la creación de la historia clínica electrónica interoperable; la Resolución 866 de 2021, que se enfoca en el conjunto de elementos de datos clínicos relevantes para la interoperabilidad de la historia clínica en el país; y la Resolución 1995 de 1999, que regula el manejo de la Historia Clínica. También es importante mencionar la Ley 1438 de 2011, que establece la obligatoriedad de implementar la historia clínica electrónica. Por último, la Ley 1751 de 2015 refuerza las normas anteriores al garantizar que la historia clínica sea tratada de manera confidencial y reservada, permitiendo que solo pueda ser conocida por terceros con la autorización previa del paciente o en los casos previstos por la ley. Esta ley también garantiza el derecho del paciente a consultar la totalidad de su historia clínica de forma gratuita y a obtener copias de esta.

Problemática que aborda e intenta resolver esta resolución

La Resolución establece la implementación del Resumen Digital de Atención en Salud (RDA) en el marco de la interoperabilidad de la Historia Clínica Electrónica (IHCE), lo que facilitará el intercambio de epicrisis o resúmenes al finalizar las atenciones en salud en servicios de Urgencias, hospitalización y consultas ambulatorias. Con ello, se define un modelo para la interoperabilidad de la Historia Clínica Electrónica en Colombia, abordando la problemática de la fragmentación de la información en salud.

Esta fragmentación surge cuando las atenciones se realizan entre diferentes prestadores que operan con sistemas de historia clínica dispares y utilizan distintos proveedores tecnológicos. Al unificar el proceso de intercambio de información, la resolución busca garantizar una continuidad asistencial más efectiva y reducir la posibilidad de errores derivados de la falta de acceso a información completa y actualizada sobre el historial médico de los pacientes.

 Matriz de actores

Actor / Institución Rol Nivel de Interés Nivel de Influencia Responsabilidades
Persona titular de la historia clínica Usuario final del sistema, sujeto de la información. Alto Medio Consentir el acceso a la información clínica.
Representante legal del titular de la historia clínica Actúa en nombre del titular cuando corresponde. Alto Bajo Autorizar el acceso a la información clínica del titular cuando sea necesario.
Prestadores de servicios de salud Generan, gestionan y comparten la información clínica. Alto Alto Implementar la interoperabilidad del IHCE a través del RDA.
Actualizar sus sistemas de información.
Garantizar la seguridad de los datos clínicos.
Entidades responsables del pago Gestionan el pago de los servicios de salud. Medio Medio Asegurar que los pagos se realicen conforme a la información registrada en el IHCE.
Entidades adaptadas al SGSSS Administran el acceso y prestación de los servicios de salud. Medio Medio Colaborar en la interoperabilidad del sistema a nivel institucional.
Entidades que administran planes voluntarios de salud Ofrecen y gestionan planes complementarios de salud. Medio Medio Integrar la información de sus asegurados en el sistema de IHCE.
Administradoras de Riesgos Laborales y fondos de pensiones Gestionan las prestaciones laborales y pensionales en salud. Medio Bajo Incorporar los datos de salud laboral y pensional en el IHCE.
Entidades de Regímenes de Excepción o Especial Proveen servicios de salud bajo regímenes especiales. Medio Bajo Integrar sus sistemas de salud con el IHCE y compartir la información relevante.
Entidades Territoriales (departamentales, distritales y municipales) Supervisan la implementación territorial del sistema. Alto Alto Supervisar, vigilar y controlar la incorporación de IHCE en su jurisdicción. Usar la información anonimizada para mejorar la gobernanza en salud. Articular acciones de comunicación.
Compañías de seguros Ofrecen pólizas de accidentes de tránsito que cubren servicios de salud. Bajo Bajo Acceder a la información con la autorización del titular para gestionar reclamaciones y pagos.

 

Objetivos de la resolución

En primer lugar, el RDA permitirá un acceso ágil y seguro a los antecedentes médicos de los pacientes, lo que mejorará la toma de decisiones clínicas y garantizará la continuidad de la atención. Al facilitar la interoperabilidad entre los sistemas de información de las diferentes instituciones de salud, se reducirá la posibilidad de errores médicos y se acortarán los tiempos de respuesta en situaciones críticas. Este avance es esencial para asegurar una atención más precisa y coordinada.

A su vez, la resolución pone un fuerte énfasis en la confidencialidad y seguridad de la información, que se protegerá mediante tecnologías como firewalls, VPNs y mecanismos de cifrado. El respeto por la privacidad de los datos sensibles es un componente fundamental, en consonancia con las normativas vigentes sobre protección de datos personales. Esto garantiza que el acceso a la historia clínica de los pacientes quede restringido a profesionales autorizados y se mantenga bajo estrictos controles de seguridad.

Además, la interoperabilidad no solo beneficia la calidad de la atención, sino también la eficiencia en el uso de recursos. La capacidad de compartir información entre instituciones reducirá la duplicación de pruebas y procedimientos, lo que generará ahorros significativos para el sistema de salud. Así, se optimizarán los costos administrativos y se aliviará la carga burocrática que enfrentan tanto los profesionales como los pacientes.

La resolución asigna responsabilidades claras a los actores del sistema de salud. Mientras que los prestadores de servicios deberán actualizar sus sistemas de información y adoptar los estándares de interoperabilidad, el Ministerio de Salud supervisará la implementación y garantizará su cumplimiento. Asimismo, las entidades territoriales tendrán un papel clave en la vigilancia y supervisión de la integración de los sistemas de salud locales con el sistema centralizado.

Igualmente, al incluir información demográfica de los pacientes, así como medicamentos recetados, alergias, diagnósticos, signos vitales, historial de vacunación, procedimientos realizados, entre otros, se acelera el acceso a datos clínicos esenciales, lo que permite una atención médica más eficiente y precisa. Esta integración de información facilita la toma de decisiones por parte del personal de salud, optimiza la continuidad del tratamiento y reduce la duplicidad de pruebas o procedimientos, mejorando así la calidad del servicio prestado y la experiencia del paciente.

No obstante, la implementación de esta normativa no está exenta de desafíos técnicos. Algunas instituciones, especialmente aquellas con infraestructuras tecnológicas limitadas, enfrentarán dificultades para cumplir con los requisitos en los plazos establecidos. Para mitigar este desafío, la resolución contempla plazos diferenciados para que los prestadores de salud actualicen sus sistemas, otorgando hasta 12 meses para aquellos que aún no cuentan con un sistema robusto de historia clínica electrónica. Así mismo, los prestadores de servicios de salud que cuentan con Sistema de Información de Historia Clínica Electrónica, seguridad perimetral y conectividad contarán con 6 meses para su integración al mecanismo de interoperabilidad de Historia Clínica Electrónica, a partir de la fecha de publicación de la presente resolución, lo anterior bajo el direccionamiento del Ministerio de Salud y Protección Social.

A largo plazo, lo que se busca es que la interoperabilidad contribuya a la creación de un sistema de salud más integrado, permitiendo, por un lado, mejorar la atención individual, por el otro, facilitar la recopilación y análisis de datos a nivel nacional. Esto es fundamental para la investigación en salud pública, la planificación de políticas y la respuesta ante crisis sanitarias.

A modo de conclusión

La implementación del Resumen Digital de Atención en Salud (RDA), en el marco de la interoperabilidad de la Historia Clínica Electrónica (IHCE), representa un avance significativo hacia la modernización del sistema de salud colombiano. Esta resolución busca resolver el problema de la fragmentación de la información clínica al establecer lineamientos que permiten el intercambio fluido y seguro de datos entre diferentes prestadores de servicios de salud. Al unificar los sistemas dispares de historia clínica en un modelo interoperable, se garantiza una atención continua y coordinada, lo que mejora la calidad del servicio y reduce la posibilidad de errores médicos.

Asimismo, el proyecto refuerza la protección de los datos personales sensibles, un aspecto crucial en el manejo de información clínica. Mediante el uso de tecnologías avanzadas, como cifrado de datos y redes privadas virtuales (VPNs), la resolución asegura que los datos de los pacientes sean accesibles solo a quienes estén autorizados, respetando la privacidad y confidencialidad establecida por las normativas legales vigentes. De este modo, se consolida un sistema más robusto y seguro que permite optimizar los recursos tecnológicos disponibles en el sector salud.

El éxito de esta normativa dependerá en gran medida de la capacidad de los prestadores de servicios de salud y las entidades territoriales para adaptarse a los requisitos técnicos del sistema. Si bien se establecen plazos diferenciados para su implementación, las instituciones con infraestructuras tecnológicas limitadas pueden enfrentar desafíos importantes. No obstante, la resolución prevé estos obstáculos y otorga un margen de tiempo más amplio para que dichas instituciones puedan ajustarse y cumplir con las disposiciones de la interoperabilidad de manera efectiva.

Finalmente, la adopción de la interoperabilidad no solo beneficiará la atención clínica individual, sino que también facilitará la recolección de datos a gran escala, lo que será fundamental para el desarrollo de investigaciones en salud pública, la planificación de políticas sanitarias y la respuesta rápida ante crisis sanitarias. En conjunto, esta resolución es un paso decisivo hacia la digitalización completa del sistema de salud en Colombia, con beneficios a largo plazo para pacientes, prestadores y el sistema en su totalidad​.

Resultados del informe PINNOS 2024: este es el panorama de la innovación en salud en el país

Resultados del informe PINNOS 2024: este es el panorama de la innovación en salud en el país

  • El Instituto de Prospectiva e Innovación en Salud (INNOS) lanzó la tercera edición del informe Panorama del Ecosistema de Innovación en Salud en Colombia, PINNOS 2024.
  • El sector público solo representa el 10 % de las inversiones en innovación en salud, mientras que el sector privado abarca el 70 %.
  • El reporte resalta que el país cuenta con 221 organizaciones que están desarrollando innovaciones en diversos sectores de la salud
  • El gasto de bolsillo en salud ha aumentado un 5.1 % en lo que va del año, lo que ha aumentado la preocupación sobre el acceso a medicamentos y procedimientos especializados.

Bogotá, octubre de 2024 – El Instituto de Prospectiva e Innovación en Salud (INNOS) de la Universidad del Bosque, lanzó recientemente su tercera edición del informe ‘Panorama del Ecosistema de Innovación en Salud en Colombia (PINNOS 2024)’, un estudio que analiza las tendencias, los desafíos y las oportunidades del sector salud en el país en materia de innovación.

El informe resalta que la innovación en salud en Colombia avanza hacia una mayor digitalización y tecnificación, con un incremento del 45 % en nuevas iniciativas de salud digital, del 40 % en la implementación de telemedicina y del 35 % en proyectos de inteligencia artificial. Además, señala un aumento del 30 % en el número de startups dedicadas a la innovación en salud durante el último año.

El reporte resalta que el país cuenta con 221 organizaciones que están desarrollando innovaciones en diversos sectores de la salud. Estas iniciativas están concentradas en las grandes capitales, pero comienza a verse presencia a nivel nacional. La mayoría dan soluciones alrededor de enfermedades crónicas no transmisibles, salud materno-infantil, salud sexual y reproductiva y determinantes sociales. El ecosistema continúa creciendo y allí yace la importancia de que el Estado sea uno de los principales promotores de la innovación en el país.

Sin embargo, INNOS también advierte sobre el riesgo que implica la limitada participación del sector público en el financiamiento directo, que representa apenas el 10 % de las inversiones en innovación, frente al 70 % cubierto por el sector privado. Esta situación ha generado una disminución del 20 % en las inversiones en investigación y desarrollo, lo que podría afectar gravemente la capacidad del país para mantenerse a la vanguardia en innovación sanitaria.

PINNOS 2024 no solo refleja la actualidad, sino que también actúa como una guía para nuestro futuro. Nos desafía a fortalecer nuestras alianzas, a invertir más en talento humano y a continuar impulsando la creación de productos y servicios innovadores que transformen la atención en salud en el país”, afirma Carlos Felipe Escobar, director de INNOS y HUB iEX.

Al respecto, María Clara Rangel Galvis, rectora de la Universidad El Bosque, indica que “Este reporte es un llamado a la unión de esfuerzos entre gobierno, sector privado, sociedad civil y academia para promover la investigación aplicada en el sector productivo a través de colaboraciones interdisciplinarias, con el objetivo de fortalecer el ecosistema de innovación en salud en el país y prepararnos para los desafíos futuros”.

Regulación, incentivos fiscales y financiamiento: principales desafíos

INNOS también resalta que el ecosistema de innovación continúa enfrentando retos importantes, como lo son las barreras regulatorias que impactan al 60 % de las innovaciones y la ausencia de incentivos fiscales, con un 54.54 % de los actores reportando un deterioro en este aspecto. Además, el acceso a un financiamiento sigue siendo un desafío crítico, ya que el 80 % de los innovadores manifiestan dificultades para obtener los recursos necesarios.

Por otro lado, el informe resalta la incertidumbre en torno al financiamiento del sistema de salud tras la posible aprobación de la reforma propuesta por el Gobierno Nacional, y que podría poner en riesgo la sostenibilidad de futuras innovaciones. De hecho, según Así Vamos en Salud, el gasto de bolsillo en salud ya ha aumentado un 5.1 % en lo que va del año, lo que incrementa la preocupación sobre el acceso a medicamentos y procedimientos especializados, principalmente para los pacientes más vulnerables.

Hoy, en Colombia, nos enfrentamos a un panorama marcado por la incertidumbre en torno a reformas, decisiones clave y dificultades estructurales que presionan fuertemente nuestro sistema de salud. A pesar de estos desafíos, la innovación debe seguir siendo una prioridad, esto implica fortalecer y respetar el sistema de propiedad intelectual, así como fomentar la inversión en investigación, la transferencia de tecnología y el crecimiento de nuestros emprendedores”, asegura Maria Clara Escobar, presidente ejecutiva de AFIDRO.

A pesar de todo ello, durante el lanzamiento del Reporte, se resaltaron iniciativas que están transformando positivamente el sistema. A la Secretaría de Salud de Bogotá se le otorgó un reconocimiento por el fortalecimiento y dinamización del Modelo de Atención de Salud de Bogotá, MÁS Bienestar. Por su parte a la Secretaría de Salud de Cali, se reconoció por sus resaltados al acercar los servicios a la comunidad y a los territorios, utilizando las tecnologías de la información. De igual manera, se destacó a la Gobernación del Atlántico por Vart, un dispositivo que descubre la retinopatía en bebés prematuros.

Por su parte, por el desarrollo de acciones colaborativas y que involucran múltiples actores del ecosistema, se destacaron:

  • LASOS – Alianza para reducir la mortalidad por cáncer de mama en el país. –  Tenemos conectada a Alejandra Toro Moreno de Luz Rosas
  • Rutas Saludables – mujeres en territorio (ROCHE – USAID) alianza para mejorar las habilidades del personal de salud en la lucha contra el cáncer de mama y de cuello uterino.

Dada la coyuntura que hoy vive el país, la innovación es una apuesta para transformar los retos del sistema, en oportunidades de tranformación. Por esto, se resaltaron algunas de las iniciativas que generan resiliencia:

  • CIELUM: iniciativa que Busca generar sostenibilidad en sistemas de salud americanos y bienestar para 1 billón de personas. Utiliza un modelo para identificar e intervenir ineficiencias en salud: comportamentales, clínicas y administrativas.
  • GLYA: Solución de telemonitorización de pacientes desde el hogar. Supervisa variables clínicas y medicamentos sin apps, proporcionando retroalimentación en tiempo real a pacientes, cuidadores y sistema sanitario para mejorar la gestión de condiciones.
  • DOC-DOC: Hospital Virtual que conecta pacientes con especialistas médicos vía chat o video en menos de 60 segundos.

PINNOS 2024 presenta una serie de recomendaciones estratégicas dirigidas a los actores del ecosistema. Estas incluyen mantener el compromiso y la cooperación entre actores, impulsar alianzas público-privadas, y aprovechar la disrupción industrial para fomentar soluciones innovadoras. Además, se recomienda desarrollar modelos de financiamiento innovadores, mejorar la gobernanza del sistema de salud, y fortalecer la participación de la academia, emprendedores y la industria en el proceso de innovación.

Pueden consultar el reporte completo en: https://drive.google.com/file/d/15bNcag_psTPTir1ZQweFA8rRe9FWabDT/view?usp=drive_link

Adicionalmente le invitamos a revivir el evento en el siguiente enlace: https://www.youtube.com/watch?v=ALM_3kZ1kOU

El mundo avanza hacia nuevos paradigmas en la Oncología

El mundo avanza hacia nuevos paradigmas en la Oncología

En el World Medical Innovation Forum 2024, el panel sobre el “Nuevo Paradigma en Oncología” destacó cómo los avances tecnológicos y los diagnósticos tempranos están transformando el tratamiento del cáncer. El panel, liderado por expertos como el Dr. Keith Flaherty y el Dr. Jason Zemansky, subrayó que herramientas como la inteligencia artificial (IA) y el uso de muestras biológicas no invasivas permiten diagnósticos más precisos y anticipados, lo que es clave para mejorar los resultados oncológicos. Estos avances abren oportunidades significativas para países como Colombia, donde el acceso a diagnósticos tempranos y tratamientos avanzados sigue siendo un desafío.

En el contexto colombiano, es fundamental que se continúe impulsando la Red Nacional de Investigación en Cáncer, como un vehículo para consolidar los esfuerzos en la lucha contra esta enfermedad. Este tipo de redes permiten articular las capacidades de investigación científica, tecnológica e innovadora en el país, lo cual es clave para enfrentar los desafíos del cáncer con un enfoque más colaborativo. Integrar tecnologías como la IA en las plataformas nacionales de salud e investigación mejoraría la precisión de los diagnósticos y la personalización de los tratamientos, especialmente en áreas donde los recursos son limitados.

En el panel, se destacó la necesidad de hacer accesibles los tratamientos innovadores, como las terapias CAR-T, que aunque prometen mejorar significativamente la supervivencia de ciertos tipos de cáncer, tienen un alto costo que limita su disponibilidad. En Colombia, fortalecer la Red de Investigación en Cáncer y desarrollar un ecosistema robusto de ciencia, tecnología e innovación en torno a la oncología podría facilitar la integración de estos avances y, al mismo tiempo, permitir que los desarrollos globales en tratamiento y tecnología lleguen a los pacientes de manera más equitativa.

Para aprovechar plenamente estas oportunidades, se necesita una colaboración intersectorial que integre a actores del sector público, privado, académico y de salud. Además, consolidar un ecosistema que articule estos esfuerzos es crucial para garantizar que Colombia acceda a los últimos avances en tecnología oncológica y también pueda desarrollar soluciones propias que respondan a las necesidades específicas de su población. Esto contribuiría a mejorar los resultados en los tratamientos del cáncer, al tiempo que también impulsaría a Colombia como un referente en innovación médica.

Este enfoque integrado, impulsado por la Red Nacional de Investigación en Cáncer y un ecosistema de innovación robusto, permitiría que Colombia esté mejor equipada para enfrentar los retos del cáncer, aprovechar las oportunidades que ofrece la tecnología actual y asegurar un acceso más equitativo a los tratamientos avanzados para toda su población.

Nuevas herramientas y desafíos en la atención médica: lecciones para el sistema de salud en Colombia

Nuevas herramientas y desafíos en la atención médica: lecciones para el sistema de salud en Colombia

En el panel “Delivering Care: New Tools, Evolving Challenges, Bold Aspirations” del World Medical Innovation Forum 2024, expertos abordaron los desafíos actuales del sistema de salud, particularmente tras la crisis financiera derivada del COVID-19, que ha dejado a más del 50% de los sistemas hospitalarios en Estados Unidos operando en pérdidas. Los panelistas, moderados por Andrew Bressler de Bank of America, discutieron cómo las instituciones de salud y hospitales académicos se ven amenazados, no solo financieramente, sino también en su capacidad de seguir siendo motores de educación, investigación, innovación y cuidado comunitario. Este panorama refleja muchos de los problemas que enfrenta actualmente el sistema de salud en Colombia, especialmente en los hospitales universitarios y las universidades que forman el talento humano en salud.

Anne Klibanski, MD, presidenta y CEO de Mass General Brigham, subrayó que los sistemas de salud académicos, esenciales para la formación de las nuevas generaciones de profesionales de la salud, no han cambiado significativamente en los últimos 100 años. En un contexto donde las universidades y hospitales en Colombia también están bajo presión, la necesidad de repensar los modelos de formación y atención es crucial. En este sentido, la colaboración entre el gobierno, las instituciones académicas y la industria puede ser una solución clave. Klibanski señaló que para garantizar la sostenibilidad del sistema y mejorar el acceso a la atención, es fundamental que las instituciones se enfoquen en innovar en la educación y formación médica, integrando la tecnología digital en sus procesos.

En Colombia, los hospitales vinculados a universidades juegan un papel esencial en la formación de profesionales de la salud y en la prestación de servicios de salud de alta complejidad. Sin embargo, al igual que muchas instituciones en los Estados Unidos, enfrentan restricciones presupuestarias significativas que afectan su capacidad de innovar y crecer. Una de las soluciones propuestas en el panel fue adoptar modelos de atención basados en el valor, los cuales buscan mejorar la calidad de los cuidados, disminuir costos y optimizar el uso de recursos.

En Colombia, el desafío de la sostenibilidad es cada vez más urgente. Los panelistas subrayaron la importancia de disminuir los costos administrativos en los sistemas de salud, de modo que los recursos puedan concentrarse en mejorar los servicios, la investigación y la innovación. Actualmente, gran parte del presupuesto del sistema de salud colombiano se destina a la administración, en lugar de canalizarse hacia la investigación médica o la mejora de los servicios hospitalarios. Este enfoque afecta el impacto de los hospitales universitarios, que deberían ser un motor más potente de innovación y avance científico.

Otro de los puntos discutidos fue cómo las tecnologías digitales están redefiniendo el cuidado médico. En el caso de Mass General Brigham, la adopción de modelos digitales y de inteligencia artificial (IA) ha permitido personalizar la atención médica, mejorar la calidad del servicio y reducir costos operativos. En Colombia, estas tecnologías podrían ser clave para optimizar los procesos de atención en los hospitales universitarios, pero su adopción sigue siendo limitada por la falta de infraestructura y recursos tecnológicos.

Klibanski también mencionó la colaboración de Mass General Brigham con Best Buy Healthcare, lo que ha permitido la expansión del Hospital en Casa, un modelo que ha democratizado el acceso a la atención médica especializada y ha reducido los costos. En Colombia, iniciativas similares podrían ser extremadamente útiles, especialmente en zonas rurales o de difícil acceso, donde la atención hospitalaria es escasa y los recursos limitados.

La discusión también resaltó la importancia de monetizar de manera ética los datos médicos, un tema que adquiere relevancia en un entorno donde el valor de la información clínica es cada vez más reconocido. Para Colombia, donde el manejo de datos es un desafío tanto tecnológico como ético, encontrar formas de aprovechar esta información podría ser un paso clave hacia un sistema de salud más eficiente y sostenible.

La crisis actual representa una oportunidad para repensar el rol de los hospitales universitarios en Colombia. Estos centros no solo deben formar a los profesionales del futuro, sino también ser líderes en la implementación de nuevas tecnologías y modelos de atención. El foro subrayó que es vital que las instituciones académicas de salud no se queden atrás en la transición hacia modelos híbridos y digitales, ya que esto les permitirá mantener su relevancia y adaptarse a los desafíos del siglo XXI.

Las discusiones del World Medical Innovation Forum 2024 evidencian que los sistemas de salud, tanto en Estados Unidos como en Colombia, necesitan una transformación profunda para enfrentar los desafíos post-COVID. El enfoque debe estar en modernizar las instituciones, integrar las tecnologías digitales y reducir los costos administrativos, redirigiendo esos recursos a la investigación y el servicio directo al paciente. Los hospitales universitarios en Colombia, pilares en la formación de talento y en la atención especializada, están en una posición privilegiada para liderar este cambio, pero solo si logran adaptarse a modelos más colaborativos y tecnológicamente avanzados.

El reto está en aprovechar el potencial de la tecnología, como la inteligencia artificial, y replicar modelos como el Hospital en Casa que ya han demostrado éxito en otros contextos. Con una mayor inversión en investigación e innovación y un esfuerzo conjunto entre gobierno, universidades y sector privado, Colombia puede no solo mejorar la atención en salud, sino también consolidar su ecosistema de ciencia y tecnología en el sector salud, asegurando que sus hospitales universitarios no solo sobrevivan, sino que lideren el futuro de la medicina en la región.

Lecciones de Boston para Bogotá: Innovación en salud y alianzas estratégicas para fortalecer la competitividad regional

Lecciones de Boston para Bogotá: Innovación en salud y alianzas estratégicas para fortalecer la competitividad regional

El World Medical Innovation Forum 2024 en Boston es el evento organizado por Mass General Brigham y patrocinado por Bank of America, que reúne a más de 2,000 líderes de salud, biotecnología, inversión e innovación para explorar avances disruptivos en áreas como oncología, enfermedades raras, inteligencia artificial generativa, entre otros. INNOS se suma como participante en las conversaciones de la agenda, identificando cómo las colaboraciones público-privadas y las tecnologías emergentes pueden aplicarse para mejorar los sistemas de salud, particularmente en ciudades como Bogotá.

El panel Healthcare Innovation and Regional Competitiveness reunió a líderes como John Fish (Suffolk), Reshma Kewalramani, MD (Vertex Pharmaceuticals) y Jonathan Kraft (The Kraft Group). En la discusión se destacó cómo la innovación en salud, junto con una colaboración estratégica entre sectores y una visión de largo plazo, ha permitido a Boston (USA), posicionarse como un referente global en bienestar y competitividad regional. Hoy estas lecciones pueden ser valiosas para que Bogotá, a través de su Plan de Desarrollo, fortalezca su ecosistema y supere los desafíos actuales.

Un tema central del panel fue cómo la salud y la educación se han convertido en los dos grandes motores de la economía en Boston. La ciudad ha logrado consolidarse como una capital intelectual del país gracias a su apuesta por estos sectores, impulsada por un enfoque de innovación continua y serial, donde los avances no se buscan solo para obtener resultados inmediatos, sino para generar impactos a largo plazo. En este sentido, el sector privado ha sido un aliado clave para el desarrollo de estos pilares, invirtiendo y apoyando iniciativas que no solo benefician a sus propias industrias, sino que mejoran el bienestar general de la ciudad.

Bogotá, en su contexto actual, tiene el reto y la oportunidad de aprender de esta experiencia. Con su Plan de Desarrollo, la ciudad enfrenta desafíos importantes en su sistema de salud, pero también puede aprovechar estos retos como una oportunidad para impulsar un modelo de desarrollo regional que integre salud, educación e innovación tecnológica, tal como lo ha hecho Boston. La clave está en alinear los esfuerzos de todos los actores, desde el sector público hasta el privado, para generar un cambio estructural que trascienda sectores.

Uno de los puntos clave que se abordó en el panel fue la importancia de generar un impacto que trascienda la industria de la salud, llevando los beneficios de la innovación hacia otras áreas como el empleo, el bienestar social y la calidad de vida. Esto se ha logrado en Boston mediante un enfoque de colaboración público-privada y el desarrollo de un ecosistema que fomenta la participación de universidades, hospitales, empresas tecnológicas y actores del sector privado. Para Bogotá, replicar este tipo de alianzas puede ser un camino eficaz para mejorar el bienestar de su población y avanzar hacia una mayor competitividad regional.

El sistema de formación avanzada de Boston está alineado con las demandas del mercado y con las necesidades de su estrategia de desarrollo regional. Las universidades y centros de investigación en la ciudad colaboran estrechamente con los sectores de salud e innovación para garantizar que el talento que se forma pueda enfrentarse a los desafíos del futuro. Para Bogotá, resulta esencial establecer este tipo de alineación entre el sistema educativo y el sector salud, integrando tecnologías emergentes como la inteligencia artificial y la big data, que aparte de mejorar los procesos de atención, también optimizan la gestión de los recursos y el análisis de datos para prever necesidades y mejorar la calidad de vida de la población.

Un concepto clave que resaltaron los panelistas fue la mentalidad de innovación serial, que ha permitido a Boston destacarse como un Hub de desarrollo sostenible en salud. Este enfoque no se trata solo de innovar una vez, sino de hacerlo constantemente, adaptándose a las nuevas tendencias tecnológicas y económicas. Bogotá puede adoptar esta filosofía para convertir la innovación en un proceso continuo, integrando su Plan de Desarrollo con soluciones a largo plazo que no solo mejoren su sistema de salud, sino que transformen su capacidad de generar bienestar y desarrollo económico.

Otro aspecto relevante del panel fue cómo la ciudad de Boston ha entendido que la tendencia actual de innovación en salud, impulsada por tecnologías disruptivas como la inteligencia artificial y el análisis de big data, es diferente a las anteriores. Esta nueva ola de innovación presenta oportunidades sin precedentes para transformar completamente el sistema de salud. Los actores en Boston han aceptado el desafío de ser pioneros en esta transformación, comprometiéndose con el juego largo y apostando por un futuro donde la salud y la tecnología se integren profundamente. Bogotá también puede ser parte de esta transformación si logra establecer una estrategia de adopción de CTI en salud y aprovechar el potencial que estas herramientas tienen para mejorar la eficiencia del sistema y generar mayor equidad en el acceso para la Bogotá-región.

Finalmente, el panel hizo hincapié en la importancia de pensar en grande y asumir que los cambios significativos requieren tiempo y compromiso. Boston ha demostrado que, al apostar por el juego largo, se puede construir un ecosistema robusto que genere beneficios sostenidos en el tiempo. El reto para Bogotá está en cómo alinear su estrategia de salud con las demandas del desarrollo regional. Para ello, la colaboración entre el sector público y privado, el uso inteligente de tecnologías emergentes y una visión clara de largo plazo serán fundamentales para que la ciudad pueda superar sus barreras actuales y explote las oportunidades que tiene sobre la mesa desde las condiciones habilitantes de transformación del ecosistema de innovación.

La nueva Ley de Financiamiento: ¿dónde está el sector salud?

La nueva Ley de Financiamiento: ¿dónde está el sector salud?

Hace unos días, el Ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, presentó ante la Cámara de Representantes el proyecto de ley de Financiamiento 2024 (PL 300-2024C), que ha sido recibido como una nueva reforma tributaria. Esta iniciativa tiene como objetivo principal aumentar la recaudación fiscal y promover la sostenibilidad ambiental, lo que podría tener repercusiones en varios sectores de la economía. Sin embargo, resulta llamativo que el proyecto no mencione de manera explícita al sector salud, especialmente en un contexto en el que este enfrenta graves dificultades de financiamiento y escasez de recursos.

A pesar de que el proyecto de ley propone aumentar el recaudo en un 0,7% del PIB en 2025 y un 0,1% en promedio en los años siguientes (2026-2030), este incremento de recursos no está destinado al fortalecimiento del sistema de salud. La falta de nuevas fuentes de financiación específicas para el sector pone de manifiesto que esta reforma tributaria, más conocida como la Ley de Financiamiento[1], no tiene como prioridad abordar los retos del sistema de salud. En cambio, la atención parece centrarse en sectores como la transición energética, la sostenibilidad y el turismo, lo que plantea interrogantes sobre las prioridades del gobierno en términos de política pública. Esta ausencia del sector salud en el proyecto de Ley resulta, al menos, incoherente si se tiene en cuenta además que el Ministerio de Salud ha expresado al Congreso la necesidad de aumentar 27% los recursos de funcionamiento y 83% los recursos de inversión para 2025.

El principal desafío: La ausencia del sector salud en el proyecto de ley de financiamiento

El mayor desafío que plantea esta ley de financiamiento para el sistema de salud es, precisamente, su ausencia en el texto radicado en la Cámara de Representantes. En un contexto de crisis financiera en el sector, la falta de un plan específico para la inversión en infraestructura sanitaria, la actualización del valor de la Unidad de Pago por Capitación (UPC) y el pago de los presupuestos máximos, generan una gran incertidumbre. A pesar de la evidente necesidad de recursos, la priorización de otros sectores genera interrogantes importantes sobre el futuro del sistema de salud y abre la posibilidad de que los problemas que hoy enfrenta se sigan profundizando con el tiempo. Se esperaría que, ante los constantes llamados que se han hecho para prestar atención a los problemas de financiamiento actuales y asumir los costos adicionales de una reforma a la salud, el ejecutivo emprendiera acciones para asegurar nuevos recursos que oxigenen el sistema. Sin embargo, este proyecto de Ley no lo hace.

Adicionalmente, hay que tener en cuenta que el aumento de impuestos propuesto podría desacelerar la inversión privada en el sector, afectando la capacidad de obtener financiamiento a través de recursos privados y alianzas público-privadas, que han sido importantes para el desarrollo de proyectos en el país. La industria farmacéutica, por su parte, también podría verse afectada por regulaciones ambientales que, aunque necesarias, incrementarán los costos operativos de manera inmediata, reduciendo la competitividad de muchas empresas en el corto plazo.

Si bien el proyecto introduce un componente verde en la Regla Fiscal, que en teoría podría ser aprovechado para financiar infraestructuras ecoeficientes, no se establece claramente cómo estos recursos beneficiarían específicamente al sector salud. Aunque la construcción de hospitales sostenibles podría reducir costos operativos a largo plazo, no parece haber una intención firme de priorizar estos proyectos dentro del marco de la reforma.

En este sentido, el incremento de la recaudación tributaria abre la puerta para explorar alternativas de financiamiento que no han sido contempladas en la propuesta actual. Esta es una oportunidad para innovar en modelos más eficientes y sostenibles, identificando nuevas fuentes de financiamiento y desarrollando mecanismos que aseguren que parte de los recursos generados se destinen al fortalecimiento del sistema de salud, especialmente en las regiones más vulnerables, donde el acceso a servicios de atención primaria sigue siendo insuficiente.

Una oportunidad para la innovación en salud

Aunque el proyecto de ley de financiamiento no atiende directamente las necesidades del sector salud, ofrece la posibilidad de explorar enfoques innovadores en el ámbito sanitario. Una de estas oportunidades sería aprovechar los incentivos de la economía verde para crear un “Ciclo Blanco para la Salud”, dentro de la Regla Fiscal. Este concepto podría incluir inversiones específicas en tecnologías sostenibles y soluciones de bajo impacto ambiental para mejorar la infraestructura hospitalaria y los servicios de salud, con especial atención a las zonas rurales.

Además, el proyecto de ley de financiamiento crea un espacio propicio para pensar en modelos financieros innovadores, coherentes con las tendencias globales de sostenibilidad, que aprovechen las nuevas dinámicas internacionales de financiamiento verde y responsabilidad social. Estas nuevas formas de financiamiento podrían alinearse con los objetivos de sostenibilidad, integrando los avances tecnológicos y económicos en modelos más eficientes para el sector salud.

Por último, esta situación ofrece una oportunidad para que el debate público preste mayor atención a las dificultades financieras que enfrenta el sistema de salud. Es fundamental que se priorice en la agenda legislativa la necesidad de abordar de manera directa el financiamiento del sistema de salud, para garantizar que este sector reciba los recursos necesarios para su sostenibilidad.

De este modo, aunque el sector salud sigue ausente en el debate legislativo -al menos en lo que a la Ley de Financiamiento se refiere-, esta podría verse como una oportunidad para repensar su desarrollo, siempre y cuando se logre incorporar propuestas concretas que aseguren que parte de los recursos generados se destinen efectivamente a mejorar el sistema de salud. De no hacerlo, corremos el riesgo de que la salud quede relegada una vez más frente a otras prioridades del gobierno.

 

[1] Aunque la ley de financiamiento y la reforma tributaria suelen confundirse, no son lo mismo. Es importante conocer algunas de sus diferencias clave. En primer lugar, a diferencia de las reformas tributarias, los proyectos relacionados con leyes de financiamiento cuentan con una mayor variedad de instrumentos (Artículo 347 de la Constitución Política de 1991). Estos proyectos se enfocan principalmente en la necesidad “vinculante” de equilibrar las finanzas públicas para responder a las demandas y asegurar el funcionamiento del sistema político, como señala el Observatorio Fiscal de la Universidad Javeriana y el ex ministro de Hacienda José Manuel Restrepo. En este tipo de leyes, se pueden incluir diversas medidas, desde ajustes en el perfil del gasto público hasta modificaciones en el Estatuto Tributario. Si el objetivo es realizar cambios significativos en este último, se podría recurrir a una reforma exprés. En segundo lugar, las reformas tributarias tienen un alcance más amplio. Su objetivo es modificar el Estatuto Tributario con el fin de optimizar el recaudo.